Día Mundial del Olivo: vital en nuestra tierra, vital en nuestra industria y nuestro empleo

Día Mundial del Olivo: el árbol que cohesiona Andalucía y le proporciona riqueza industrial y cultural

El pasado año 2019, la Unesco declaró el 26 de noviembre como Día Mundial del Olivo. Reconoció de esta forma la importancia que este árbol y su cultivo tienen como elemento de unidad entre los pueblos y culturas. Es una celebración nueva, un homenaje al que nos queremos unir desde USO-Andalucía por su importancia para la industria y el empleo en nuestra región.

El olivo, árbol milenario que llegó a nuestro país de la mano de los fenicios, proliferó con los romanos en la Península Ibérica. El olivo nos convirtió, ya en aquella época, en uno de los principales exportadores de aceite de oliva. Por lo tanto, el árbol y su fruto, la oliva o aceituna, siguen siendo uno de los factores principales para el arraigo de los pueblos y culturas.

Desde USO, queremos resaltar, en esta celebración, el papel que el olivo desempeña como símbolo de paz y sabiduría en muchas culturas. Es fundamental en la lucha contra la desertificación y el cambio climático. Ojo, porque el olivo captura más CO2 del que emite en todo el proceso de cultivo y extracción del aceite. En definitiva, repercute positivamente en el desarrollo sostenible y contribuye a la creación de empleo Andalucía y otras muchas regiones del país.

El sector de la aceituna y el aceite de oliva: necesidad de precios justos

En USO no podemos dejar pasar este día sin dar voz a las reivindicaciones del sector de la aceituna. Desde la Federación de Industria de USO-Andalucía, solicitamos unos precios dignos y mejores mecanismos para evitar desplomes injustificados de los mismos.

Estos factores ponen en peligro la sostenibilidad del cultivo y el medio de vida de zonas rurales que basan su economía en el olivo y la industria que gira en torno al cultivo.

Además del precio del aceite, potenciar una mayor transformación y promoción del producto podrían traernos mayor riqueza sociolaboral. Vamos a analizar algunos de los datos principales que nos aporta el sector ligado al olivo.

Algunos datos sobre el olivo y el aceite de oliva, en su día

Cada diez segundos, se consume en todo el mundo una tonelada de aceite de oliva. Este cultivo, en alza, supone que todos los años se planten nada menos que 40 millones de olivos en todo el mundo, un árbol que ha dejado de ser exclusivo del Mediterráneo y se adapta a latitudes con clima similar.

España sigue siendo el mayor productor mundial de aceite de oliva: triplica de largo al segundo país, Italia. Según datos recientes recogidos por la Universidad Complutense de Madrid, España supera el 1,5 millones de toneladas, mientras que Italia se queda en 450. España prácticamente duplica en producción de aceite de oliva a la suma del resto de producción mundial.

Y, en concreto, solo la provincia de Jaén produce más aceite de oliva que toda Italia. Según estas estimaciones, Jaén, capital olivarera mundial, produce una cuarta de todo el aceite de oliva del planeta. Producción importante también en otras provincias andaluzas, como Córdoba y Sevilla, y más residual en el resto.

Sin embargo, Italia supera a España en exportación: 243.000 toneladas frente a 225.000. Es por eso que, en muchos países, se cree que Italia produce más aceite. Si bien somos conscientes que mucho del aceite que no se exporta se debe a nuestro gran consumo interno, muy superior al italiano, desde FI-USO-Andalucía pedimos un mayor acceso a la promoción exterior de nuestras empresas aceiteras. Imprimirle alto valor añadido a una gran producción revierte en mayor riqueza, beneficios más altos para las empresas y, por lo tanto, un empleo más estable y de calidad.

Uno de los mayores hándicaps del empleo en el sector olivarero es su alta estacionalidad: si en lugar de centrarnos en la cosecha y recogida potenciamos la transformación, estaremos ante un sector mucho más potente y estable.