Factor Sindical: entrevista a Eva Babiano, responsable de Organización y Acción Sindical

Factor Sindical, conociendo a las personas de la USO-Andalucía: Eva Babiano, responsable de Organización y Acción Sindical

Eva Babiano nació en Sevilla un 9 de junio de 1973. Estudió en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla en la especialidad de Empresas, cuya principal asignatura es Derecho Laboral. Es colegiada en el Colegio de Abogados de Sevilla desde 1999 y máster en Gestión de RRHH. Su experiencia laboral se remonta a 1998, cuando finalizó sus estudios y realizó las prácticas en el bufete de abogados de Juan Carlos Ramos, donde estuvo 2 años.

Después de su paso por el ejercicio de la abogacía, fue contratada en una consultora que trabajaba con Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. Posteriormente, se marchó a la empresa Insersa, como responsable del departamento de RRHH, donde estuvo 4 años hasta que la empresa Ibersilva, perteneciente al grupo de Celulosa Española, le ofrece ocuparse de las expropiaciones del proyecto de Regeneración del Río Pudio. En Ibersilva, estuvo trabajando hasta el año 2010, fecha en la que la empresa cierra por la crisis económica.

Los comienzos en la USO de Eva Babiano

¿Cómo fueron los comienzos en USO?

Aunque parezca mentira, mis inicios en la USO se remontan al año 2010, cuando recibo una llamada el INEM para que asista a una entrevista de trabajo en un sindicato que estaba en la Calle Doña María Coronel de Sevilla. El puesto era para ayudar a la asesoría jurídica en la campaña de horas extraordinarias de los vigilantes de seguridad. Fui seleccionada y, desde entonces, he estado ejerciendo distintas labores en la USO.

¿Hay alguna predisposición dentro de Eva Babiano que la condujera hacia la defensa de los trabajadores?

Desde que me inclino en la facultad por la rama del Derecho de Empresa, la defensa de los derechos de los trabajadores ha sido una constante. Tuve como maestro en la facultad a un gran laboralista, Eduardo Román Vaca, que nos inculcó que la defensa de los trabajadores debería ser nuestra filosofía de vida. De hecho, cuando ejercí como jefa de RRHH en INSERSA, el comité siempre apreciaba mi forma de tratar los conflictos. Aún hoy, cuando me encuentro con alguno de ellos en empresas como MATSA, me dicen “ahora sí que estás en tu sitio”.

Cuéntanos tus memorias en esta organización

No olvidaré nunca mi entrada en Doña María Coronel, era por la tarde y después de la entrevista me iba a disfrutar del concierto de U2 en el Estadio de la Cartuja. Salí con la sensación de que no había sido la elegida y mi sorpresa fue cuando al día siguiente me llamaron para decirme que me habían escogido. Desde que inicié mi andadura, la sensación que he tenido es que somos una “pequeña gran familia» y que estamos muy unidos en un único propósito: ayudar a los trabajadores. Este sentimiento hizo que mi concepto de los sindicatos cambiara, ya no los veía como “los chupasangre” que estaban para enriquecerse a consta de los trabajadores sino que otro sindicalismo existía: un sindicalismo sin grandes alardes de riqueza material pero con la gran riqueza profesional de todos los que hoy por hoy componen la USO.

FI-USO-Andalucía, la forja de Eva Babiano en USO-Andalucía

La Federación de Industria ha sido tu campo de batalla por años. ¿Cuáles son sus reivindicaciones más importantes y sus problemas principales?

La Federación de Industria fue la que me dio la oportunidad de meterme en la lucha obrera en la calle, no en los despachos, como había estado haciendo en asesoría jurídica. Por ello, le tengo un gran cariño a esta Federación, siendo además la que me ha enseñado a luchar en las empresas.

Desde la Federación de Industria de Andalucía, entendemos que es el momento de tomar la 4º Revolución Industrial como eje vertebral de nuestra economía, complementando o favoreciendo al sector turístico. Andalucía no debe ser conocida solo por sus playas y su clima, sino también por su tejido industrial y sus inversiones en I+D+i. La industria genera riqueza y estabilidad laboral, aspectos de los que Andalucía carece y, desgraciadamente, han quedado en evidencia durante la crisis del covid que estamos viviendo.

Un mayor tejido industrial nos habría permitido, por ejemplo, redirigir la producción hacia los materiales de los que carecimos durante la crisis. Otra industria, la agroalimentaria, salió reforzada en estos meses, pero en Andalucía nos empeñamos en vender el producto sin procesar, con poco valor añadido y creando empleos precarios y de temporada en el campo. Debemos apostar por ser nosotros quienes elaboremos el fruto de nuestros campos, que dará lugar a factorías con puestos de trabajo estables y con mejores condiciones laborales.

La cuestión está en desarrollar más apoyos sobre los que descansen economía y empleo en nuestra comunidad para no volver a tener esta sensación de pánico por el bloqueo del sector turístico como eje económico principal de Andalucía. Incluso el propio turismo debe reinventarse y mirar a todo nuestro patrimonio natural y cultural, buscando el turista de interior, de naturaleza y desestacionalizado, que es el que, además, más riqueza genera y menos impacto ambiental crea.

La minería del pasado y el presente, y la I+D+i

Debe de existir alguna anécdota que deba pasar a la historia.

Hay tantas… En este tiempo, hemos tenido muy buenos momentos, pero también malos. No obstante, me quedo siempre con los buenos, que es lo que nos hace seguir luchando. Siempre recordaré anécdotas con el histórico Pepe Vía, con el que me embelesaba escuchando sus historias sobre sindicalismo. Recuerdo un viaje con él a Algeciras para reunirnos con un grupo de mujeres estibadoras que reivindicaban el poder acceder a los puestos que, según la empresa, eran solo para hombres.

También recuerdo nuestra primera campaña electoral en la empresa MATSA y cómo en las asambleas nos llevábamos a los trabajadores de calle, llenando los salones de los pueblos de la cuenca minera donde dábamos las asambleas ante el asombro de nuestros competidores. Entonces, podíamos ver las caras de esos dirigentes de los grandes sindicatos cuando en los recuentos nos convertíamos en el sindicato mayoritario en la minería onubense. Para mí, es un gran orgullo que, junto con grandes mineros sindicalistas, como son Aníbal González o José Ángel Martín, hayamos convertido a la USO en referencia del sindicalismo en esta cuenca minera.

¿Este país necesita una nueva revolución industrial?

Por supuesto. Y ha quedado más que evidenciado con la crisis del covid. Como ya hemos hablado, Andalucía no puede seguir viviendo solo y exclusivamente del turismo. Necesita inversión en industria, necesita tejido industrial y la era de la robótica ha llegado para quedarse; por eso necesitamos inversión en I+D+i.

¿Nos hemos quedado atrás en la historia de Europa en ese sentido?

Hemos perdido una oportunidad de oro de ser pioneros en industria renovable, siendo la región europea con mas horas de sol y habiendo invertido en I+D+i en energía renovable. Ahora, Alemania se encuentra por encima de nosotros porque nosotros hemos dejado de apostar por esta industria. Es lamentable que Europa haya elegido a España como “lugar de vacaciones” y haya obviado la inversión en industria, que es lo que realmente enriquece a un país.

Un nuevo reto: la responsabilidad en la Unión Regional

La Gestora de USO-Andalucía es tu actividad fundamental. ¿Cuál es la función de Eva Babiano dentro de ella?

La Gestora de USO-Andalucía es mi nuevo reto profesional. Estoy muy ilusionada con que la organización haya contado conmigo para acometer esta ardua tarea. Dentro de la misma, mi área es la encargada de la Organización y Acción Sindical en Andalucía.

¿Qué objetivos para el futuro tiene esta gestora?

Llevar a que la USO de Andalucía sea un referente de buena gestión a nivel nacional, que sea la organización en la que todos se miren para cumplir sus objetivos.

¿Cómo se desarrolla el sindicalismo en Andalucía?

En Andalucía, por fin estamos rompiendo con la hegemonía que durante tantos años ha reinado, y que es el eje formado por CCOO y UGT. Aquí, UGT ha campado a sus anchas gracias al paraguas político del partido gobernante en nuestra región, que le ha abierto las puertas de las grandes empresas. En los últimos años, desde la USO hemos conseguido demostrarles a los trabajadores que otra forma de sindicalismo es posible y que se necesitan sindicatos autónomos y sin vinculación política para poder luchar contra las empresas sin tener que pagar ningún peaje ni precio. Esto ha costado en Andalucía, pero la tendencia es al alza, siendo además la única de las grandes organizaciones de trabajadores en crecer en los últimos años, por encima incluso de los sindicatos mayoritarios, obteniendo mayores cuotas de representación en la comunidad autónoma de Andalucía.

¿Qué hace diferente a nuestra organización?

Nuestra independencia y cercanía con los trabajadores. Somos el único sindicato que estamos aquí para defender los derechos de los trabajadores y no para enriquecernos con sus problemas, como lamentablemente hacen otros.