Majorel, foco de infección y un atentado contra la salud pública ante el coronavirus, denuncia USO

USO-Cádiz denuncia que la empresa de telemarketing Majorel, antigua Qualytel, no está cumpliendo las medidas de salud pública decretadas para frenar los contagios por coronavirus covid-19. Majorel tiene a sus 1.000 empleados hacinados, «sin aplicar ningún tipo de medida preventiva», alerta Pilar Bravo, responsable de la Federación de Servicios de USO en Cádiz y delegada sindical en Majorel. Y, todo ello, a pesar de la pandemia global declarada por la OMS y las medidas excepcionales decretadas por el Gobierno de España ante la emergencia sanitaria.

«No está facilitando los medios materiales ni separa a las trabajadoras, la mayoría mujeres, con la distancia mínima de seguridad. Han separado a las teleoperadoras más de lo habitual, pero no lo suficiente, y es la única medida que han tomado», continúa la delegada. «La plantilla no ha recibido instrucciones sobre cómo actuar, no hay geles desinfectantes. 300 personas han estado expuestas al riesgo este fin de semana y lo peor llega mañana», alerta la representante sindical de USO.

Porque el contact-center gaditano estaba en fin de semana a medio gas, pero «mañana, a partir de las 8, justo cuando entra oficialmente en vigor el estado de alarma, se juntan más de 1.000 personas en el centro de trabajo». Los hechos ya han sido denunciados ante Inspección de Trabajo, la Policía, la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía y el Ministerio de Trabajo. Pilar Bravo recuerda que las trabajadoras, ahora en riesgo sanitario por falta de prevención, «están fuertemente precarizadas, con salarios mensuales de unos 500 euros porque la mayoría tienen jornada parcial».