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Sube el paro en Andalucía en 23.759 personas y la contratación temporal continúa al alza

El paro vuelve a azotar a Andalucía durante el mes de octubre. Un total de 23.759 personas han perdido sus empleos, lo que supone una subida del 3,11%, convirtiendo a Andalucía en la comunidad donde más empleo se ha destruido en toda España, dejando la cifra total en 787.114 parados registrados.

“Además, volvemos a estar en los primeros puestos con Cádiz, como segunda provincia española donde más subió el paro, con más de 6.500 nuevos desempleados. Y como comunidad de contrastes que somos, Almería es la segunda provincia donde se ha registrado un mayor descenso del desempleo, con 2.057 parados menos, creándose puestos de trabajo en todos los sectores”, apunta Jesús Postigo, coordinador general de USO-Andalucía.

Para el coordinador general de USO-Andalucía, “lo más preocupante es la elevada temporalidad de los contratos que se firman y que colocan a los trabajadores en una situación inaceptablemente precaria y de tremenda incertidumbre ante los signos de recesión que nos llegan. Desgraciadamente para nuestro mercado laboral, la temporalidad está instalada como un mal persistente en la contratación, que devalúa hasta límites intolerables nuestras condiciones de trabajo, y que se agudiza preocupantemente ante los malos augurios económicos en el corto/medio plazo”. De los más de 490.000 contratos firmados en octubre -cifra que se ha aumentado en un 8,70%-, el 94,06% son contratos temporales, que se han incrementado un 10% con respecto a septiembre.

Por otro lado, otro elemento a analizar en cuanto a la contratación en octubre “es la falta de contratación indefinida inicial cuando se contrata a un trabajador, ya que el 53% de los 29.102 contratos indefinidos suscritos en octubre son conversiones”, indica Postigo. Por ello, desde USO-Andalucía “volvemos a pedir al Gobierno de la Junta que se olvide de campañas y se ponga manos a la obra para atajar los problemas y carencias del mercado laboral andaluz”, reclama Postigo.

Andalucía lidera la destrucción de empleo y las conversiones de contratos temporales irregulares

El paro ha subido en Andalucía en 4.866 personas en septiembre, la mayor cifra de nuevos desempleados del país en términos absolutos, fruto sobre todo del fin de la temporada de playa, que lastra especialmente Cádiz, Málaga y Granada. “El inicio del otoño alivia el empleo en Sevilla, con la vuelta al trabajo de oficinas y administraciones, pero seguimos teniendo un tipo de contratación mísera que en este mes se demuestra que es estructuralmente fraudulenta. Andalucía ha registrado solo un 7,4% de contratos indefinidos, de nuevo muy por debajo de la media nacional, pero casi duplicando la habitual tasa mensual. Sin embargo, si nos fijamos en las contrataciones indefinidas, vemos que más de la mitad son conversiones de contratos temporales irregulares, no contratación estable real: 17.291 contratos convertidos, en su mayoría obra de la campaña especial de Inspección de Trabajo, frente a 15.948 contrataciones indefinidas iniciales de los más de 450.000 contratos que se firmaron en Andalucía en todo el mes”, analiza Jesús Postigo, coordinador general de USO-Andalucía.

“Esa lucha contra el fraude en la contratación debe ser una constante, no únicamente fruto de campañas veraniegas. Como se ha podido comprobar este mes, una gran parte de la mala calidad del empleo de nuestra región se debe al recurso a la ilegalidad con tal de abaratar costes, por la vía de la elusión o bonificaciones en impuestos, e incluso infracción de las condiciones laborales legales de los trabajadores y trabajadoras. Además, seguimos padeciendo una desventaja sectorial endémica por la fuerte dependencia estacional del turismo, que nos está avisando de su agotamiento, pues el modelo en el que basamos la producción turística está obsoleto y necesita repuntar a la luz de proyectos que se adapten a las demandas más recientes del mercado”, continúa Postigo.

El sector agrícola, “marcado por el inicio de las contrataciones para la recolección de los cítricos, especialmente en Huelva y Sevilla, supone el contrapunto del fin de la temporada turística. Otro sector basado en jornadas que no resuelve el fondo del problema de la empleabilidad. Más de uno de cada cuatro españoles en paro está en Andalucía, y del total de nuestros parados, un 60% son mujeres, otra de las tareas pendientes en nuestra comunidad: luchar contra la brecha de género”, concluye el coordinador general de USO-Andalucía.

Andalucía registra el segundo peor dato de contratación indefinida en el primer semestre de 2019

Andalucía es la segunda comunidad autónoma española donde resulta más difícil obtener contrato indefinido. “Solo a un 2,29% de las personas que firman un contrato en la región le están ofreciendo de primeras un contrato indefinido, según los datos del Servicio Público de Empleo del primer semestre. Casi un tercio de la ya de por sí baja cifra media nacional, que es un 6,23%”, denuncia Jesús Postigo, coordinador de USO-Andalucía, sobre datos extraídos del informe “Anomalías de nuestro mercado de trabajo”, elaborado por el Gabinete de Estudios de USO.

En Andalucía se han formalizado en este semestre más de dos millones y medio de contratos, 2.561.836, pero solo 58.692 indefinidos. El 92,51% del total son “obra o servicio” o “eventuales por circunstancias de la producción”. “Tenemos más de 3 millones de empleados, pero solo en seis meses se han firmado casi esos contratos. Eso da una idea de que muchos de ellos no pueden ser considerados puestos de trabajo, sino un empleo relámpago que se encadena por días o semanas hasta el infinito. No se corresponde ese nivel de contratación con liderar el paro con un 21% y más de 800.000 andaluces sin trabajo”, continúa Postigo.

Aunque las cifras son ligeramente superiores a nivel nacional, el estudio destaca que el 30% de los contratos dura menos de una semana y que la duración media de un contrato en España es de 50 días: “hay trabajadores que viven en permanente temporalidad. Se sigue usando la fórmula de contratar de lunes a viernes para ahorrarse el pago del descanso semanal y volver a dar de alta a los trabajadores al lunes siguiente. Es necesario reforzar la labor de la Inspección de Trabajo para hacer un seguimiento y demostrar esas irregularidades justificadas desde el empleador por las ‘circunstancias de la producción’”, pide la secretaria de Comunicación y Estudios Sindicales de USO, Laura Estévez.

Del más de un millón de nuevos ocupados en la última década en nuestro país, un 50,5% es temporal. Por eso, desde USO, se apuesta por “que se simplifiquen los tipos de contrato, pues el de obra y servicio, por ejemplo, es un coladero de indefinidos camuflados de temporales; que se penalice la contratación temporal y, especialmente, su abuso; y que se vigilen las causas que de verdad demuestran que un contrato sí debe ser temporal”, concluye Estévez.

La mayoría de los contratos los suscriben los hombres, a pesar de que hay más mujeres en paro, y los menores de 30 años, especialmente castigados por el encadenamiento de contratos. Los mayores de 50 años, que suponen el grueso de parados, sin embargo están marginados en la dinámica de contratación y les resulta más difícil reengancharse al mundo laboral.