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El maltrato que no se ve. USO-Andalucía, contra la violencia de género

En USO-Andalucía estamos comprometidos con la lucha contra la violencia de género, que ha dejado hasta el momento 1o mujeres asesinadas

Según el Ministerio de Igualdad, en lo que llevamos de año el número de mujeres asesinadas por violencia de género asciende a 38. Son 1.166 desde 2003, cuando se empezó a contabilizar. En Andalucía han sido 10 las mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas, 3 más que en el año 2021.

También en Andalucía han aumentado todos los porcentajes con respecto a la violencia machista durante el segundo trimestre de 2022, según el Informe anual sobre violencia de género publicado por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del CGPJ.

El número de denuncias se ha incrementado en un 11,2 % habiéndose registrando un total de 9.423, y superando la cifra del primer trimestre de 2022 (7.210). Por encima de la media nacional se situaron Murcia (28,5), Baleares (27,6), Comunidad Valenciana (24,2), Canarias (21,5), Andalucía (21,3) y Madrid (19,6).

Entre los meses de abril y junio, se abrieron un total de 2.449 órdenes de protección por los órganos judiciales. En el primer trimestre del año, se registraron 544 infracciones penales por violación, siendo 76 en Andalucía. Esta cifra ha aumentado en un 16,47 % con respecto al año anterior.

La violencia machista, también en las empresas

Dentro de las empresas también existe la violencia machista. Ese es uno de los maltratos que no se ven, y que centran la campaña de USO con motivo del 25N, pero dejan serias secuelas a las mujeres víctimas.

“En las empresas tenemos a muchas mujeres trabajadoras que sufren acoso sexual y por razón de sexo, porque también existe violencia de género en el ámbito laboral. Son las negociaciones de planes de igualdad y protocolos de acoso las herramientas con las que podemos hacer frente a esta lacra dentro de las empresas. Por eso formamos y asesoramos a quienes, en representación de USO-Andalucía, integran esas comisiones negociadoras”, destaca Pilar Bravo, secretaria de Igualdad.

Con respecto al porcentaje de violaciones en Andalucía, en el que se aprecia un claro y preocupante aumento de los casos, Bravo considera «que es imprescindible una regulación del acceso a la pornografía. Desde edades tempranas, los menores puede acceder a páginas donde se les transmite violencia sexual con claros estereotipos de género, donde la mujer es un mero objeto sexual para satisfacer al hombre ejerciendo la violencia”.

La prostitución también preocupa, ya que es parte de la violencia machista hacia las mujeres. Es urgente que se ofrezcan alternativas sociales y de empleo a mujeres que se prostituyen, para que puedan salir de esa esclavitud, al igual que es fundamental legislar para perseguir y condenar a los usuarios de los servicios y a proxenetas.

También desde USO-Andalucía seguimos denunciando que faltan protocolos dentro de los centros educativos para que desde las edades más tempranas aprendan conceptos básicos de igualdad entre hombres y mujeres y para eliminar estereotipos de género con los que se acentúan las desigualdades y la discriminación hacia la mujer.

Por otro lado, sigue fallando el seguimiento a los hombres con órdenes de alejamiento, saltándose en muchos casos dichas órdenes, con el peligro que eso conlleva para la víctima. «Es fundamental, por tanto, más formación al personal encargado de velar por la seguridad de las víctimas. Así como a las personas trabajadoras de los servicios sociales e incluso a la Judicatura y Fiscalía», defiende la secretaria de Igualdad de USO-Andalucía.

«Desde USO-Andalucía, seguimos sin ver medidas contundentes, no se están poniendo los medios suficientes por parte del Gobierno, y de las instituciones en general, para acabar con esta lacra que es la violencia de género», concluye Bravo.

USO-Andalucía se suma al «Proyecto Believe», contra las secuelas de la violencia de género

USO-Andalucía se suma al "Proyecto Believe", contra las secuelas de la violencia de género

USO-Andalucía cierra un acuerdo de colaboración con el «Proyecto Believe», que investiga las secuelas neuropsicológicas o neurocognitivas en mujeres que han sufrido violencia de género

USO-Andalucía ha cerrado un acuerdo de colaboración con el “Proyecto Believe”, para contribuir desde nuestra organización con la lucha contra la violencia de género. El Instituto Andaluz de la Mujer ha acogido la presentación de este programa de investigación, que pretende avanzar en el estudio de las secuelas que deja la violencia de género en las mujeres que la sufren.

El proyecto lo conforma un equipo científico que estudia las secuelas neuropsicológicas y neurocognitivas, buscando nuevos enfoques para rehabilitar a las víctimas de estas secuelas. Su evaluación ayudará a visibilizar y entender las áreas que han sufrido un mayor deterioro tras atravesar esa relación violenta (ya sea física, psicológica y/o sexualmente). Así, se pueden focalizar las que necesitan mayor intervención o rehabilitación que les posibiliten continuar con sus vidas.

La investigación de campo concluye que el 50 % de las mujeres maltratadas física y psicológicamente sufren alternaciones cerebrales por estrés postraumática. Una secuela que está pasando inadvertida y que, por lo tanto, es ignorada por el sistema para su tratamiento. Actualmente, los servicios sanitarios no abordan ningún tipo de valoración cognitiva de las mujeres víctimas de violencia de género.

El equipo del «Proyecto Believe» lleva años trabajando en este campo, con más de una veintena de proyectos de investigación nacionales e internacionales, así como premios y publicaciones en medios científicos de prestigio, como el obtenido en 2012 por su artículo «Secuelas cognitivas en mujeres víctimas de violencia de género».

Colaboración con USO-Andalucía para detectar beneficiarias de esta atención personalizada

Los responsables del proyecto han precisado la necesidad de colaborar con las organizaciones sociales para que el proyecto no se quede únicamente en investigación, sin una aplicación práctica. Por ello, USO-Andalucía se ha sumado a «Believe» a través de un acuerdo de colaboración que permitirá canalizar, desde nuestra organización, el contacto de víctimas con este equipo que les prestará atención profesional y especializada.

Las mujeres que sean víctimas de violencia de género y que se dirijan a nuestra organización podrán ser puestas en contacto, si así lo desean, con el equipo neurocientífico del «Proyecto Believe» para que reciban diagnóstico y, si fuera necesario, tratamiento. Siempre de forma gratuita, a través del programa.

USO-Andalucía recibe habitualmente consultas relacionadas con la violencia de género y sus efectos, tanto en el ámbito de la salud como en el laboral. De hecho, USO cuenta con un servicio jurídico gratuito orientado a los casos de discriminación laboral por razón de sexo, que en ocasiones deriva en violencia sexual. Por este y el resto de canales de comunicación con el sindicato, USO-Andalucía espera llegar a las mujeres que padecen violencia machista y dispensarles el máximo de ayuda para salir de ella y de sus efectos.

Las mujeres que deseen realizar una consulta sobre el «Proyecto Believe», recibir diagnóstico de su equipo o cualquier otra petición de información sobre este y otros programas contra la violencia de género, pueden hacerlo en el correo electrónico de la responsable de Igualdad de USO-Andalucía, Pilar Bravo: pilar.bravo@usoandalucia.net

USO-Andalucía, comprometida con la lucha contra la violencia de género

USO defiende la creación de redes de apoyo a las víctimas de violencia de género, una lacra que ha dejado en Andalucía 7 mujeres asesinadas en lo que va de año

Un total de 7 mujeres han sido asesinadas víctimas de la violencia de género en lo que va de año en Andalucía, según el último balance del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. 

Hasta el primer trimestre de 2021 se han interpuesto un total de 7.210 denuncias en la región. Las denuncias presentadas entre abril y junio de este año aumentaron un 22,7 % y el número de víctimas, un 27,6 %.

El porcentaje de denuncias presentadas directamente por las víctimas representa un 76,4 % de todas las registradas, siendo mínimo el porcentaje de denuncias presentadas por los familiares de la víctima, que representan el 1,4 % del total de las registradas durante el trimestre.

Por comunidades autónomas, Andalucía se sitúa en el quinto lugar, con una tasa de 19,1 víctimas por cada 10.000 mujeres. La más alta se ha registrado en Islas Baleares (25,7). También por encima de la media nacional se situaron Comunidad Valenciana (21,8), Murcia (21,6), Canarias (20,7) y Madrid (18,2).

Por lo que respecta a las órdenes de protección, durante el segundo trimestre de 2021 se solicitaron ante los juzgados de violencia sobre la mujer y ante los juzgados de guardia andaluces un total de 2.372 órdenes de protección, un 11,8 % más que hace un año. De ellas, fueron acordadas 1.993, un 15,6 por ciento más que en el mismo trimestre de 2020.

Unas cifras que revelan que esta lacra ha permanecido oculta durante la pandemia

Todas estas cifras y porcentajes demuestran que, durante los meses más duros de la crisis sanitaria, no disminuyó la violencia machista. Esta permaneció oculta, debido al confinamiento y a las dificultades que han tenido las víctimas para enfrentarse a sus maltratadores, sin posibilidad de escapar del control al que están sometidas, y denunciar ante el juzgado o en comisaría.

En los últimos meses han aumentado también las violaciones y agresiones por sumisión química, por lo que se recomienda a las mujeres que no pierdan de vista sus vasos en bares y discotecas. Si hay sospecha de que nos hayan drogado, a nosotras o a alguna acompañante, es fundamental acudir a los servicios sanitarios cuanto antes, porque ese tipo de drogas suelen permanecer muy poco tiempo en el organismo y, seguidamente, acudir a interponer la correspondiente denuncia.

Es lamentable que las mujeres vivan con miedo constantemente, tanto en espacios privados como públicos.

La responsable de Igualdad de USO-Andalucía, Pilar Bravo, insiste en la necesidad de que toda la sociedad se implique en la lucha contra la violencia de género pues «la complicidad no ayuda para acabar con esta lacra. Es fundamental que los entornos más cercanos a las víctimas den el paso de denunciar la situación de malos tratos y violencia machista, ya que actualmente este tipo de denuncias de familiares corresponden solo al 1,4 % de las presentadas».

Este año, con motivo del 25N, desde USO hacemos hincapié en la importancia de establecer redes de apoyo dentro de los centros de trabajo así como negociar en las empresas planes de igualdad en los que se incluyen protocolos de acoso. «Todas nuestras delegadas y delegados de USO-Andalucía se ponen a disposición de cualquier trabajadora que esté sufriendo maltrato y acoso fuera o dentro de su empresa», recalca Bravo.

La violencia de género en Andalucía deja 9 mujeres asesinadas en 2020

Pilar Bravo, responsable de Igualdad y Acción Social, analiza los datos de violencia de género de 2020 en Andalucía 

Las cifras de violencia de género que ha dejado 2020 en Andalucía, siguen siendo preocupantes. En total, 9 mujeres han sido asesinadas por violencia de género, y Andalucía fue la comunidad en la que se cometieron más asesinatos machistas.

Pilar Bravo, responsable de Igualdad y Acción Social del sindicato USO-Andalucía, considera que «las instituciones siguen fallando a la hora de proteger tanto a las mujeres víctimas como a sus hijos. La desconfianza de las mujeres a la hora de denunciar a sus agresores evidencia que no se encuentran amparadas y seguras a la hora de romper con su maltratador y dar el paso de denunciarlo. Por eso instamos a los Gobiernos a que pongan todas las medidas necesarias para transmitirles seguridad a esas mujeres y facilitarles la ruptura con el maltratador mediante la denuncia». 

Además, USO-Andalucía vuelve a reivindicar la necesidad de poner en marcha programas específicos dentro de las escuelas desde las edades más tempranas que enseñen la igualdad real y eduquen en el respeto y la tolerancia, con formación en valores desde la perspectiva de género al profesorado. 

La lucha de USO contra la violencia de género se materializa también con la acción de la Caja de Resistencia y Solidaridad (CRS), a disposición de las afiliadas que sufran maltrato. 

«Animamos nuevamente tanto a las mujeres que están siendo maltratadas como a cualquier persona que sea consciente de un maltrato a que llamen al 016 y denuncien. Esta llamada no deja huella en la factura de teléfono», defiende Bravo. 

45 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en 2020

El año 2020 ha finalizado con un total de 3 menores y 45 mujeres asesinadas por violencia de género. A Andalucía, con 9 víctimas de violencia de género en 2020, le siguen Cataluña (8), Comunidad Valenciana (5) y Castilla la Mancha (4). 

Desde que empezaron a recopilarse los datos en 2003, 1.078 mujeres han muerto a manos de sus parejas o exparejas. Estos asesinatos han dejado a 26 menores huérfanos en 2020, con un total de 304 desde 2013. 

En cuanto a los agresores, nueve se suicidaron, por lo que no podrán ser juzgados por sus crímenes. 

Sólo siete de esas 45 mujeres asesinadas habían presentado denuncia previa contra los agresores, lo que supone solo un 15%. Una de ellas tenía orden de protección vigente.

Estos son los datos de violencia de género en Andalucía

Estos son los datos de violencia de género en Andalucía. Sindicato USO-Andalucía

El Área de Igualdad de USO-Andalucía analiza los datos de violencia de género en la región, donde 6 mujeres y 2 menores han sido asesinados en lo que va de año

Para Pilar Bravo, responsable del área de Igualdad de USO-Andalucía, es de vital importancia la lucha por la igualdad y contra la violencia de género. Así, USO reclama con urgencia la creación de Juzgados Especializados en Violencia de Género, con formación en perspectiva de género específica para jueces y fiscales. Y también defiende una educación en las escuelas con la que, desde edades tempranas, se enseñen los valores de la igualdad real entre hombres y mujeres.

Datos de violencia de género en Andalucía

En España, 32 mujeres fueron asesinadas en lo que va de año por sus parejas o exparejas. Fueron 55 en el año 2019, y 1.052 desde 2003.

En Andalucía se han registrado 212 casos de violencia de género en 2020, siendo la región con más asesinatos machistas. En lo que va de año, 6 mujeres han muerto en manos de sus parejas o exparejas, incluyendo la ultima víctima en Jerez de la Frontera (Cádiz).

Andalucía es también la región con más menores huérfanos por asesinatos machistas de toda España, siendo 57 las víctimas menores.

Hasta el pasado mes de julio, se atendieron 1.288 llamadas en Andalucía por violencia de género en el teléfono 016.

Con respecto al sistema de seguimiento por medios telemáticos de las medidas de alejamiento en el ámbito de violencia de género en Andalucía, hasta julio del 2020 se encontraban en esa situación 698 mujeres, frente a las 343 del año anterior . Así, esta cifra se ha incrementado en Andalucía un 103,5%.

En cuanto al sistema de seguimiento integral en los casos de violencia de género (sistema VioGen) hay un total de 139.515 casos en Andalucía, estando activos en estos momentos 17.631. Se estos, 4.004 son de especial relevancia por niveles de riesgo, siendo el mayor porcentaje de toda España.

Actualmente hay 243 casos activos en Andalucía de menores de edad, de 14 a 17 años, un porcentaje elevadísimo con respecto a los datos generales.

Se reduce el número de denuncias en los juzgados andaluces

Según datos de actividad de los órganos judiciales andaluces en la lucha contra la violencia de género, en el segundo trimestre del 2020, las denuncias por violencia de género en los juzgados andaluces (6.907) se redujeron un 18,9 %, respecto al segundo trimestre del año pasado.

También, el número de mujeres víctimas (6.565) descendió un 20,2 %, y el total de sentencias dictadas por los órganos judiciales fue de 1.186, un 58,51% menos. Siete de cada diez sentencias condenan al maltratador.

USO-Andalucía, contra la violencia de género

USO-Andalucía se muestra en contra de cualquier tipo de violencia hacia la mujer, por el simple hecho de serlo, y animamos a quienes sufran cualquier tipo de agresión, tanto física como psicológica, a que busquen ayuda y denuncien a su agresor.

A través de los comités de empresa, juntas de personal o secciones sindicales, las víctimas pueden acudir a nuestros representantes para pedir asesoramiento y ayuda. USO-Andalucía se pone a disposición de las trabajadoras y trabajadores que sufran maltratos y recuerda que la Caja de Resistencia y Solidaridad (CRS) ayuda a todas las afiliadas que estén sufriendo esta lacra machista.

Los jóvenes andaluces tienen mucho más claro que los adultos que el control de la pareja es violencia

Los jóvenes andaluces tienen mucho más claro que tienen derecho a la privacidad en el ámbito de la pareja y que deben respetar también ese derecho en la otra parte. Son datos que se desprenden de la encuesta sobre “acoso y control en la pareja”, elaborada por las Secretarías de Comunicación y Estudios Sindicales, y Formación Sindical e Igualdad de USO, con motivo de la campaña del 25N, que este año lleva por lema #NoControles.

Andalucía está, en general, en la media nacional o por encima de ella en cuanto a la permisividad en el control de la pareja. Así, el 27,03% de los encuestados residentes en la región considera que una persona debe poder desbloquear el teléfono de su pareja, mientras que 1 de cada 5, el 20,43%, está de acuerdo en que también debe conocer sus contraseñas para acceder a redes sociales.

“Resulta curioso y esperanzador que, hablando de redes sociales, sean las generaciones más jóvenes quienes tengan más conciencia de dónde termina la libertad de cada miembro de la pareja y empieza la del otro: entre los menores de 29 años, el porcentaje de permisividad es 0%, tanto en hombres como en mujeres. Es la generación inmediatamente mayor, la de 30 a 39 años, donde encontramos un mayor control: el 29% de ellos cree que tiene derecho a conocer las claves de su compañero y la obligación de dar a conocer las suyas”, explica Pilar Bravo, responsable adjunta de Igualdad de USO-Andalucía.

En cuanto a tener la obligación de mostrar los mensajes a su pareja, “en general, se da una conciencia de que no debe ser así, aunque hay un 2,16% de encuestados que cree que sí es inherente el control a tener pareja. Todos los que opinan esto son mayores de 30 años y tienen actualmente una pareja. La distribución entre hombres y mujeres es exactamente del 50%, al igual que ocurre en la pregunta que más nos preocupa: el 1,08% de los andaluces opina que, si su pareja no está dispuesta a mostrarle sus mensajes o compartir sus contraseñas, puede ejercer la violencia física o verbal contra ella”, continúa Bravo.

“Con la encuesta, pretendíamos saber si existe una relación entre el control hacia la otra persona con la violencia sobre ella. Efectivamente, hemos visto cómo, según las preguntas incluían un mayor grado de acceso a la intimidad, bajaba el porcentaje de personas que veían normal el compartirlo con su pareja. Sin embargo, no solo persiste quien considera que debe haber un control absoluto de lo que hace y dice la otra persona, sino que se justifica cualquier presión para conseguirlo”, alerta Dulce María Moreno, secretaria de Formación Sindical e Igualdad de USO.

Por ello, “desde USO consideramos primordial el educar en igualdad. Por suerte, la encuesta nos muestra una tendencia al cambio en las generaciones, una toma de conciencia por parte de los más jóvenes de sus derechos individuales en la pareja. No obstante, en USO consideramos que es imprescindible que se contemple un cambio en la normativa sobre acoso para que incluya la persecución, en el seno de una pareja, para dar acceso a los datos y mensajes personales”, reclama la secretaria de Formación Sindical e Igualdad de USO.

Implicar a toda la sociedad, único remedio contra la violencia de género y el repunte de asesinatos

Hasta el 6 de agosto, 38 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas este año. La última de la que se tiene constancia, una mujer de 21 años, que tenía un niño y existían denuncias previas por violencia de género, repetida estadística que nos da más de una mujer asesinada por semana, y que iguala la cifra del año pasado en la misma fecha.

Andalucía es la comunidad con mayor número de víctimas, con 8 mujeres asesinadas –la siguen Canarias y la Comunidad Valenciana, con 6 mujeres asesinadas; Cataluña y la Comunidad de Madrid, con 4; 2 en Galicia; y 1 en Aragón y Región de Murcia. Pueblos y ciudades que quedan sumidas en el silencio cuando el caso los roza por cercanía, pero que parece que ya tenemos tan interiorizado lo común de los asesinatos que solo pensamos “otra más”. Laredo, Fuengirola, Los Realejos, Estepona, Vinarós, Torre-Pacheco, Parla o Alboraya han sido, entre otros, los escenarios de esta violencia contra las mujeres.

A esta escalofriante cifra hay que añadir la de dos niños asesinados por sus padres: el menor de 10 años que fue asesinado junto a su madre en una cueva cuando intentaba protegerla, y cuyo hermano se pudo salvar al huir en el momento en el que se padre comenzó a agredirlos y que fue encontrado, con tan solo 5 años, desorientado y con la escena en su cabeza; y el último caso confirmado, el de un niño de 11 años asesinado por su padre en Murcia el pasado 25 de julio, en el que existía una denuncia previa por violencia de género, a pesar de la cual el padre seguía viendo al niño sin ningún tipo de supervisión, lo que colocó al menor en una terrible indefensión frente a su asesino.

El número de menores que han quedado huérfanos debido a esta violencia en lo que va de año es de 27; tres de ellos, además, tuvieron el trauma de encontrar los cadáveres de sus madre. Todos ellos preadolescentes: el menor, de 11 años, y el mayor, de 15. La cifra de huérfanos y huérfanas desde 2013 es de 258.

Sabemos el género que tiene esta violencia y es masculino, lo que no debe confundirse nunca con que todos los hombres sean maltratadores, pero sí nos indica que son hombres los que matan a sus parejas o exparejas, mujeres; los casos de mujeres que maten a hombres, parejas o exparejas por ser hombres no es comparable ni en cifras ni en origen de la causa.

Son hombres los que ejercen esta y otros tipos de violencia contra las mujeres, niñas y niños. El sujeto a reformar es claro, pero la tarea es una obligación de toda la sociedad: «sin educación, sin visibilización de las causas de la violencia hacia las mujeres, ocultándola bajo lemas como “malos tratos” o “todas las violencias son iguales”, solo podremos retroceder, cuando hay que seguir avanzando con las ideas claras y el objetivo definido, acabar con la violencia hacia las mujeres en todas sus formas, aumentando la condena social hacia este tipo de delitos, para que las futuras generaciones cuando lo estudien, sepan que fue algo que pasó, pero que se acabó gracias al compromiso y al trabajo de todos y todas, no es algo que vaya a desaparecer sin más. Esperemos que el objetivo no se pierda en estos momentos oscuros que vivimos», pide Dulce María Moreno, secretaria de Formación Sindical e Igualdad de USO.

Como señalábamos el pasado 22 de junio, sobre la Memoria del Consejo General del Poder Judicial relativa a 2018, el número de hombres denunciados por violencia de género ha alcanzado la cifra de 31.250, lo que supone un aumento del 7,8% con respecto a 2017. Se trata del mayor aumento en estos cuatro últimos años. Apuntábamos como dato alarmante el aumento de los casos de violencia entre la población joven, pues el número de víctimas de entre 18 y 19 años aumentó un 10,9%; los hombres denunciados con edades de 18 y 19 años aumentaron su cifra en un 14,1%. Desde 2003, año en que se empieza a contabilizar las mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas, el total de mujeres víctimas mortales es de 1.012, a las que se suman 29 menores.

Desde USO, «volvemos a transmitir, y no dejaremos de hacerlo mientras sigan matando al menos a una mujer, nuestra más profunda repulsa y condena firme contra la violencia machista, así como el compromiso de nuestra organización para sumar fuerzas en la lucha para su erradicación. Por ello, USO pone la Caja de Resistencia y Solidaridad a disposición de las afiliadas que sufren o han sufrido ataques machistas. En su reglamento, están especificadas las bases para la solicitud, deseando que ninguna de nuestras afiliadas la necesite ni ahora ni en un futuro, pero para que tengan la seguridad de una red en el caso de que la prevención falle», ofrece Moreno.