Paro de agosto: Andalucía acaba su estación talismán para el empleo sin coger aire para el otoño

El mal verano turístico agrava el paro de Andalucía al terminar agosto, sin alternativas para el otoño

Se acabó el idilio de Andalucía con el turismo extranjero y el paro escala a finales de agosto hasta cifras desconocidas en los últimos años, agravando unos datos que aún no se habían recuperado del golpe de 2008. El paro bajó levemente en el conjunto de la comunidad autónoma, el 0,05%. Un descenso imperceptible, de 468 personas, gracias a Huelva (-5.527 parados) y Almería (-1.287) con sus campañas agrícolas. El resto soportan graves subidas, con 2.018 más parados en Sevilla y, en porcentaje, un 1,43% de paro en Granada.

Andalucía tiene 957.727 personas en paro, 199.238 más que al terminar agosto de 2019 (+26,27%). Especialmente grave son los datos de Málaga, donde el paro hoy es un 33,16% superior al del año pasado.

“Las restricciones del resto de países europeos para viajar a España este verano han sido la puntilla para nuestra costa. En agosto ha caído la contratación con respecto a julio en todas las provincias. Se ha firmado un 20% menos de contratos que en agosto de 2019 y, en el caso de Málaga, un 30% menos. Y de ellos, solo el 4,7% han sido indefinidos”, analiza Jesús Payán, coordinador general de USO-Andalucía.

También en turismo, Andalucía necesita diversificar e innovar para sostener el empleo

“El turismo ha sido por décadas la única carta a la que Andalucía se juega el grueso de su economía y desarrollo. Y se ha demostrado que basta con que una persona sople a 2.000 kilómetros para que se caiga el castillo de naipes que se ha construido en torno al turismo extranjero. Es una apuesta tan arraigada e inamovible que ni siquiera hemos sabido adaptarla al turismo nacional para salvar la campaña. Otras comunidades, que llevan años apostando por un turismo más sostenible y con valor añadido han liderado todas las ratios de ocupación este verano. Hasta en el turismo hay que fomentar la innovación y la diversificación, porque en Andalucía tenemos materia prima de sobra para ello”, pide Payán.

El otoño se prevé en Andalucía “más sombrío que nunca. Si el verano no ha servido ni para blindar la vuelta a las aulas, mucho menos para crear alternativas de empleo. Afrontamos la segunda ola del covid con una sanidad herida, que no ha sido reforzada ni en los peores momentos, y sin acicates para la industria y la investigación. Andalucía está perdiendo la oportunidad de crear empleo de calidad en torno a las necesidades mundiales de la pandemia con proyectos volcados al desarrollo y fabricación de materiales que se han vuelto imprescindibles”, apunta el coordinador general de USO-Andalucía.