La plantilla de Atención a Domicilio de Isla Cristina exige protección frente al coronavirus para trabajar

La plantilla de OHL, contrata del servicio de Atención a Domicilio del Ayuntamiento de Isla Cristina, no ha dotado al personal sociosanitario de los equipos de protección para volver mañana al trabajo, a pesar de las medidas excepcionales decretadas para frenar los contagios por el coronavirus covid-19.

El servicio de atención a los dependientes está conformado por unas 125 trabajadoras, en jornadas de lunes a sábado. “Habitualmente, solo contamos con unos guantes de vinilo, que se rasgan con facilidad. Nunca hemos contado con otro tipo de protección, pero es que ahora no nos van a dar ni esos guantes”, expone Mª del Carmen Yaque, delegada por USO en el comité de empresa de OHL.

Las trabajadoras reciben el material correspondiente a cada mes. El pasado viernes, fueron citadas mañana, lunes, para darles el de marzo, junto con la nómina. “Pero hoy, nos han avisado una por una de que no podemos ir a recoger los guantes para evitar aglomeraciones. Ni siquiera esos guantes. Obviamente, ni se plantean darnos los guantes del personal sanitario, ni mascarillas ni batas desechables”, relata Yaque.

La delegada de USO remarca: “trabajamos con personas de riesgo alto. Nosotras podemos estar contagiándolos a ellos y, a su vez, llevándonos el virus a casa: también tenemos padres, familiares mayores. Exigimos que, si la empresa no se hace cargo de la seguridad de la plantilla y los usuarios, sea el Ayuntamiento, responsable en última instancia, quien nos proporcione todo lo necesario para cumplir con nuestra obligación”. Porque, recalca la delegada, “nosotras queremos ir a trabajar, somos conscientes de nuestra labor, no podemos teletrabajar. Pero queremos hacerlo en las mejores circunstancias para nosotras, nuestras familias y las personas a las que atendemos”.

Por último, las representantes de las trabajadoras de OHL recuerdan que “tampoco nos dan facilidades para conciliar. Las trabajadoras con hijos no tienen opción de quedarse mañana con ellos, cuando no tienen colegio por una situación excepcional decretada por el Gobierno.