El asesoramiento sociolaboral a inmigrantes de USO-Andalucía, sin descanso en el confinamiento

Durante el confinamiento por coronavirus, USO-Andalucía ha seguido prestando asesoriamiento sociolaboral a inmigrantes

La USO de Andalucía no ha dejado de prestar asesoramiento sociolaboral a los inmigrantes durante el confinamiento por la pandemia del covid-19. Así, el balance del primer cuatrimestre, dividido entre actividad presencial y actividad telemática una vez que se decretó el estado de alarma, arroja unas cifras de atención de las que en USO-Andalucía nos sentimos orgullosos.

«El método de información ha cambiado por completo. Antes del 12 de marzo, difundíamos guías y dípticos en papel. Ahora, tenemos que hacerlo a través de la web, redes sociales, consultas por correo electrónico y teléfono… pero seguimos prestando nuestro servicio», explica Juan José Morente.

Hasta el 12 de marzo, USO-Andalucía había repartido a demanda de quienes consultaron nuestros servicios 628 dípticos del programa de asesoramiento a personas migrantes, 200 guías domésticas y 100 de extranjería. Sumados a otra cartelería, se han repartido más de 1.000 documentos al público objetivo del proyecto que desarrollamos con atención centralizada en la sede de Sevilla. Además, el abogado especialista en asuntos de migraciones, Max Adam, tiene su propio programa en la Cadena Ser de Andalucía, «Los consejos de Max», donde aborda algunas de las dudas más frecuentes que plantean las personas migrantes en sus consultas y que, a través de las ondas y los podcasts, sirven de guía para cientos más.

¿Cómo se ayuda a los inmigrantes que acuden a USO-Andalucía a pedir asesoramiento?

El programa de asesoramiento sociolaboral a personas migrantes de la USO-Andalucía realizó hasta el inicio del estado de alarma 70 entrevistas. De esas personas, 25 cumplen el perfil en cuanto a documentación y motivación para trabajar con ellos en profundidad los itinerarios de búsqueda de empleo.

A partir de ahí, «comenzamos con unos talleres prelaborales. En ellos, les damos herramientas para acometer la búsqueda de empleo, los formamos en derechos y deberes en el trabajo, la igualdad y extranjería, y les inculcamos habilidades negociadoras para acceder e incorporarse al empleo. Además, practicamos con ellos cómo afrontar la toma de decisiones y la mejora de autoestima, pues son personas cuyo entorno tiende a minusvalorarlas», explica Morente.

Con estas técnicas básicas, «los derivamos a recursos formativos gratuitos. En primera instancia, trabajamos en red con otras organizaciones que ofertan cursos o talleres, pero el plan más ambicioso, pues busca que reconozcan sus habilidades y se orienten a los estudios académicos que los estimulen», añade el técnico de asesoramiento de la USO-Andalucía.

Aunque las entrevistas personales y los talleres «se han paralizado por el estado de alarma, continuamos con el seguimiento de las personas que iniciaron esos itinerarios. Durante el confinamiento, hemos seguido recibiendo consultas por parte de los participantes, sobre todo en cuestiones de ayudas básicas y también de empleadores domésticos por cambios en jornadas laborales de sus empleados o por el subsidio extraordinario de trabajo doméstico. Además, estamos trabajando con esas personas la posibilidad de que encuentren una vocación y se establezcan por cuenta propia en el caso de no obtener un empleo por cuenta ajena. El acompañamiento durante todo el proceso es básico, pues en muchos casos los trámites y el idioma suponen una barrera en algún punto del itinerario», lamenta Juanjo Morente.